En la vida hay 2 momentos vitales en los que nos hacemos más preguntas de lo normal, y como los humanos somos muy parecidos y repetimos patrones similares, esos dos momentos son bastante fáciles de identificar.
El primero es cuando nos hacemos adultos y nos vemos obligados a elegir a qué nos queremos dedicar o qué vamos a hacer con nuestra vida. De ahí salimos sin pena ni gloria con una decisión tomada, muchas veces sin fundamento, y tiramos para adelante para explorar y descubrir.
El segundo momento es cuando nos acercamos al ecuador de los 40, años arriba, años abajo, donde empezamos a tomar consciencia del paso del tiempo y del sentido de nuestra vida, una crisis bastante común por lo que representa un cambio de etapa vital.
Es en esa nueva etapa de madurez cuando empezamos a recapitular y comparar realidades con expectativas, lo que queríamos con lo que tenemos, lo que creíamos que los demás esperaban de nosotros con lo que hemos conseguido.
Y muchas veces son esas mismas expectativas las que nos quitan claridad sobre las decisiones que tenemos que tomar. Nos hacen tan inflexibles y obsesivos con unas opciones que nos impiden ver la cantidad de oportunidades que tenemos ante nosotros, cada día, a cualquier edad, y a los 40 aún más.
A veces en esos cambios de etapa nos podemos sentir perdidos, lo cual es normal, pero nunca debemos abandonar nuestra responsabilidad de elegir lo que queremos, y por supuesto no dejar que sean otros los que tomen decisiones por nosotros.
Piensa que estos momentos de cambio son también grandes oportunidades para crecer y ordenar tu vida y tu carrera.
Cruzar la barrera de los 40 fue para mi un evento agridulce, por un lado la euforia de un cambio de década en la plenitud de mi vida, mi salud, mi familia, mis relaciones y mi profesión, no podía pedir nada más, recuerdo con emoción celebrarlo con más de 100 invitados que me sorprendieron con la proyección de un video con felicitaciones de amigos desde varios continentes.
Sin embargo, por otro lado había algo que me generaba ansiedad, quizá algo que me faltaba, no sabía qué. Algo en mi interior no me dejaba en paz, necesitaba más, una búsqueda constante agotadora, porque buscar cansa, especialmente cuando no sabes qué es.
Hasta que empecé a describir con palabras lo que sentía, ponerle nombres a esas emociones y descubrir que gran parte de lo que me hacía sufrir estaba dentro de mí y no en lo que pasaba a mi alrededor.
Y en esa búsqueda interior descubrí tres conceptos que se repetían con demasiada frecuencia: expectativas, aceptación y ego.
Expectativas porque había creado una brecha brutal entre lo que yo quería que pasara en mi vida y lo que de verdad sucedía.
Aceptación porque era lo que más tenía que trabajar para asumir que la vida viene como viene, y hay cosas que no controlamos y de las que es absurdo preocuparse.
Y ego porque hasta que no fui capaz de desapegarme del lastre del ego no fui capaz de vivir en paz y felicidad
Pues bien, para que tú también trabajes tus expectativas aceptación y ego en la búsqueda de claridad en tu vida, he seleccionado las 6 estrategias que a mí me funcionaron en mi crisis de los 40:
A continuación, te las explicoTengo 40 y no sé qué hacer con mi vida
El panorama quizás no sea el más fácil posible, pero siempre está la posibilidad de rehacer mi vida después de los 40. Muchas veces creemos que no hay lugar para seguir estudiando o que no tenemos manera de pensar que hay vida después de los 40. No te preocupes, siempre hay la forma de que puedas plantearte como cambiar de vida a los 40. Si tienes una vida ajetreada en la que has perdido los mejores años en un puesto de tranquilidad, no te rompas la cabeza queriendo volver a esa época. Probablemente, se te abran tiempos mejores ya que hay vida después de los 40. Estás en un momento clave, donde te vas a jugar muchas cosas y donde las normas del juego han cambiado. El enredo se ha hecho mucho más complicado y si no eres inteligente, no nos vamos a engañar, quizás tu final no sea tan feliz como el que estaba siendo preparado. Sin embargo, si mantienes el timón firme, lo conseguirás. Hay un montón de proyectos que se dirigen hacia la reinvención de aquellos que todavía no han podido encajar en su espacio favorito. Si entras en alguna de las plataformas que se presentan a continuación, podrás elegir entre una inmensa variedad de opciones a través de las cuales podrás ampliar tu cartera laboral y conseguir superar aquel dicho de tengo 40 y no sé que hacer con mi vida.
No puedes tirar la toalla y decir tengo 40 y no sé qué hacer con mi vida. Es el momento en el que te plantees como cambiar de vida a los 40 y comiences a abrir la multitud de mundos que están a tu alcance. Deja de lamentarte por lo que no has hecho y empieza a pensar qué puedes hacer con el espíritu de rehacer mi vida después de los 40. No te destruyas la cabeza con el infinito pasar del aburrimiento y actívate para estar todo el día de aquí para allá. Las calles están repletas de lugares en los que puedes encontrar un nuevo camino que te dirija hacia la plenitud profesional y hacia la realización personal que habías buscado a lo largo de la primera parte de tu vida. Porque como cambiar de vida a los 40 quizás sea más fácil de lo que crees, si tienes muchos amigos en la misma situación que compartan la misma problemática en la que estás situado. Si eres tú la persona que encaja en el tengo 40 y no sé qué hacer con mi vida, no te inquietes, en realidad, es una oportunidad única de utilizar toda tu experiencia para crear horizontes nuevos.
Cambiar de vida a los 40
El inconveniente sería si en vez de pensar cómo cambiar de vida a los 40 estuvieras estancado en un puesto que no te gusta y del que no ves escapatoria. No dejes de hacer lo que quieres y no te quedes en el tengo 40 y no sé que hacer con mi vida, es la hora de que te levantes del sofá y de que empieces a luchar por tus sueños con toda la fuerza de la juventud que sigue reunida en tu pecho como un nido de águilas. Si estás en el rehacer mi vida después de los 40 y tienes mucha ilusión de tu parte, no dejes que se te borre ese hálito por haber fracasado en tu primer intento. Reivindícate como un ser humano que no tiene menos que ofrecer y empieza un proceso de selección desde el cual podrás canalizar tus esfuerzos hacia una renovación. Recuerda que estás en un momento donde no puedes permitirte fallar ni perder el tiempo y eso sí que es una realidad. Por lo tanto, no te revuelques sobre la pena o todos esos sentimientos negativos que puedan haberte nacido entre las tardes de la decepción. Quizás tengas un primer modelo de reflexión que en vez de subirte los ánimos te los baje, pero en el segundo, seguramente, este se tornará en un tornado amarillo que haga que tu cuerpo emocional esté preparado para lo que se viene. Montañas de felicidad serán atravesadas por la persona que se aferre a su valía y conozca los modos de conexión que tienen las relaciones humanas para conseguir exprimir las cosas hacía su provecho.
Un nuevo tránsito está creciendo, ante una nueva etapa por la cual todo puede cambiar radicalmente o hacer que te estrelles de una manera estrepitosa. Depende de ti y de tu inteligencia que consigas hacer la jugada maestra por la cual una buena estrategia consiga recolocarte en el cuadro perfecto. No estás en un camino fácil si pretendes rehacer mi vida después de los 40, pero sin duda que tendrás unas cuantas oportunidades para sacarlas adelante si tienes la valentía necesaria y no piensas en tirar la toalla. Si todavía sientes que hay vida después de los 40 estás en el camino correcto para no perder la fuerza que te hace falta para conseguir cumplir todos tus objetivos y los sueños que aún anidan en tu interior. No te fustigues, cada cual tiene su temporalidad y la iniciativa de rehacer mi vida después de los 40. Si te entregas a una nueva formación y estás dentro de lo que refiere a los mejores cursos. No te entristezcas ni pienses que tus esfuerzos durante tantos años han sido en vano, la vez que más se te ha complicado puede ser esta, pero un sol de alegría está saliendo por el horizonte. Sé una persona inteligente y aprovecha las capacidades que tienes para que te consigan contratar en aquel trabajo por el que tanto tiempo habías estado soñando. Por fin podrás dar un giro de ciento ochenta grados a tu vida y proyectarte hacia el infinito, rompiendo las barreras del tiempo, el espacio y la edad. Si eres una buena persona, probablemente se te vaya a cumplir gracias al número de contactos que habrás ido haciendo a lo largo de los años y que una vez acumulados es la hora de que los desempolves.
1.- Hazte las preguntas adecuadas
A veces entramos en bucle con pensamientos obsesivos de los que no sabemos salir, es normal si no tenemos las herramientas adecuadas para plantearnos preguntas poderosas que nos den claridad.
Así que cuando no sabes qué hacer con tu vida, la realidad es que necesitas hacerte las preguntas adecuadas para encontrar las respuestas que necesitas.
Por eso he seleccionado las 13 preguntas que más me han ayudado en momentos de bloqueo existencial, vamos con ellas:
- ¿Quién eres tú?
- ¿Quién te gustaría ser?
- ¿Son los dos la misma persona?
- ¿Cómo te ves a ti mismo?
- ¿Cómo te ven los demás?
- ¿Cuáles son tus objetivos en la vida?
- ¿Cuál es tu plan de vida?
- ¿Cómo gestionas tus frustraciones?
- ¿Qué es lo que está fallando: tu trabajo, tus relaciones personales, tu salud?
- ¿Cómo te ves en 5 años?
- ¿Qué estás dispuesto a arriesgar para conseguir lo que quieres?
- ¿Cuál es el principal adjetivo con el que la gente te describe?
- ¿Cuál es el principal adjetivo con el que te describes a ti mismo?
Y ahora piensa algo, de todo lo que te preocupa en este momento, ¿qué es lo peor que te podría pasar? probablemente sólo aprendizaje y crecimiento, así que en cada momento de bloqueo, a partir de ahora sólo plantéate las preguntas adecuadas.
2.- Desapégate de lo que no te suma y deja atrás todo lo que te frena
En la vida, todo lo que no suma, resta, y esta filosofía puedes aplicarla a personas, objetos, pensamientos o compromisos.
Igual que organizas y ordenas tu armario de vez en cuando, también necesitas hacerlo con tu vida, desechar lo que sobra, hacer sitio para lo que falta y estructurarlo todo de forma lógica.
Piensa en lo que le pasa a tu armario si nunca lo ordenas, ¿se mantiene organizado él solo? Por supuesto que no. Cuando no haces el esfuerzo de ordenarlo se empieza a acumular ropa que nunca usas y poco a poco pierdes el control de lo que tienes.
Pues exactamente igual pasa con tu vida, tu trabajo, tu conocimiento, tus compromisos, tus actividades y relaciones.
Por eso, despegándote de todo lo que no te suma descubrirás aspectos de ti que no conocías y posibilidades que no habías imaginado, o al menos no habías plasmado sobre un papel.
Exactamente lo que a mí me hubiera gustado que me contaran hace años cuando aún daba palos de ciego en la matrix corporativa intentando encontrar mi lugar en el mundo.
Pues bien, al igual que pasa con tu armario, ordenar las prioridades en tu vida, enfocarte en lo que te interesa, y plantearte emprender por tu cuenta como cambio vital en la búsqueda de tu independencia es más una decisión que otra cosa, pues no necesitas grandes conocimientos, ni masters sofisticados, tampoco tener muchos años de experiencia o mucho dinero en el banco, no se trata de eso.
Se trata de conocer tus habilidades mejor que nadie, saber ver las oportunidades y tener iniciativa para hacer lo que los demás zombis de la matrix corporativa no se atreven, integrando tu autoconocimiento, tu propósito y tu talento con tu iniciativa emprendedora.
3.- Haz cosas que te motiven
La vida es una y pasa rápido. Evidentemente tenemos que hacer de todo, es bueno para aprender, valorar y tomar decisiones. pero una vez que lo tienes claro, debes de enfocarte en lo que más te gusta y te motiva, ¿porqué?, porque sólo así darás lo mejor de ti mismo y encontrarás tu zona de excelencia o punto de máxima contribución al mundo.
La motivación de tener un gran porqué te hará superar cualquier contratiempo en tu vida y tu carrera. Así que deshazte cuanto antes de tu saboteador interior o cualquier síndrome del impostor que te bloquee para, de una vez por todas, destrozar tus complejos y empezar a vivir en grande dándolo todo por tu misión.
4.- Crea tu propio alter ego: busca ejemplos que te inspiren
Tu alter ego, «el otro yo» en latín, es tu segundo yo, ese personaje ficticio distinto a tu personalidad original sobre el que te proyectas para impactar en el mundo con tus mejores talentos, sí, tu momento ha llegado.
Por eso es fundamental empezar a conocerte mejor para construir tu otro yo, tu yo iniciador, ¿de qué?, de algo nuevo y diferente en tu vida, tu nueva identidad, el emprendedor que llevas dentro para poner al servicio de los demás todo tu talento y conocimiento.
No hay excusas, simplemente hazlo, tanto si decides seguir con tu actividad profesional como si cambias de tercio tienes ante ti un océano de oportunidades.
Lo sé, a veces es difícil verse con otra identidad y uno entra en el bucle del bloqueo.
Si es tu caso trata de buscar ejemplos que te inspiren, no para compararte con ellos, sino para emular lo que te gusta de ellos e incorporarlo a tu identidad, ganar confianza y acabar de definir tu alter ego.
Piensa en alguien a quien admires, que te inspire, a quien no te importaría parecerte, no necesariamente por tener gran reconocimiento social, patrimonio o poder, sino más bien por ser congruente consigo mismo y haber construido una vida a su medida.
Estoy seguro que lo encontrarás, y si no es así, visualizate a ti mismo consiguiendo esa vida ideal, pues bien, ese otro tú es tu alter ego, crealo y no lo sueltes.
5.- Agradece todo lo que tienes y valora todo lo que has conseguido
Muchas veces nos olvidamos de agradecer lo que somos, lo que tenemos y lo que nos rodea.
Y aunque todos tenemos días buenos, malos y regulares, imagínate por un momento que tuvieras una herramienta para convertir un día malo en uno excelente donde todo fluye y sale mejor.
Pues bien, esa herramienta existe y es la gratitud.
La gratitud es como el efecto heliotrópico mediante el cual nos sentimos atraídos por la energía positiva igual que las plantas se dirigen al sol.
Agradece todo lo que te rodea, lo que tienes y lo que no tienes, lo que hiciste y lo que harás, el momento que estás viviendo y la oportunidad de vivirlo como tú quieras.
Diversos estudios coinciden en que practicar la gratitud mejora la salud física y mental, duermes mejor y mejora tu autoestima.
Intenta practicar la gratitud cuando estés bajo de ánimo, busca a tu alrededor algo por lo que estar agradecido, puede ser algo simple como una comida, un logro o una persona.
Una técnica que me ha ayudado es mucho recapitular, lo que he hecho en mi vida, lo que he conseguido, sin compararme con nadie, sólo con mi yo anterior, sin juzgarme por las decisiones que tomé, pues sólo lo hice con la informacion que tenia en ese momento y no con la que tengo ahora.
Así que aleja de tu vida el victimismo y la queja, y aprende a dar las gracias por lo que tienes y por lo que eres.
6.- Ayuda a los demás, desata tu sentido de contribución
Una de las claves de la felicidad es el sentido de contribución al mundo, pues sin los demás no somos nadie y casi nada tendría sentido.
Así que, si aún no tienes claro qué hacer con tu vida piensa al menos qué puedes hacer para ayudar a los demás a mejorar las suya, y eso lo sabes tú mejor que nadie, con tus cualidades, talento y actitud.
Personalmente creo que esa voluntad de contribuir es uno de los pilares de la felicidad junto con tu crecimiento personal y el cuidado de ti mismo y lo que te rodea viviendo en paz y armonía.
Estoy seguro que a estas alturas de tu vida tienes grandes conocimientos y experiencias que compartir con el mundo, eres experto en un tema, ese tema que tanto dominas y que podrías ponerlo al servicio de los demás desde este momento.
No hay nada como ese sentido de contribución a los demás, te dará un chute de energía, propósito, significado, motivación y agradecimiento que te hará imparable.
6+1. Y una estrategia extra relacionada con todas las demás.
Habrás visto que en todas las estrategias anteriores hay un trasfondo común a todas ellas, una intención, un propósito , un gran porqué.
Esa es precisamente la clave, la clave de todo es tu “porqué”.
Y eso lo podemos aplicar tanto a personas como a proyectos personales. Si no tienes clara tu motivación y no hay un propósito detrás de lo que haces, inevitablemente acabarás desmotivado.
Sin embargo, si enfocas tu energía en un propósito, además de hacer realidad lo que te propongas también lograrás vivir de ello a largo plazo.
Las personas con un propósito claro estimulan más su talento, motivándolos más a ellos mismos y a los demás. ¿Cuándo fue la última vez que te paraste a pensar cuál es tu propósito de vida?
Lo primero que debes plantearte es si lo que haces, trabajo, actividades o negocio están alineados con tu propósito de vida, tu razón de existir, cómo vas a trascender o por qué te gustaría ser recordado cuando ya no estés.
Y tu forma de vida no sólo debe estar destinada a cumplir tu propósito y generar ingresos sino también a ser útil a los demás.
Vamos con ello intentando encontrar el nexo de unión entre estas cuatro áreas vitales:
- Lo que más te gusta hacer. Todo lo que se te ocurra que te hace sentir bien y feliz, no lo pienses mucho, escribe rápido según te venga a la cabeza. No lo juzgues, no te juzgues, simplemente escribe lo que te apasiona.
- Lo que el mundo necesita. Centrarte solamente en lo que te gusta puede acabar dirigiéndote al egoísmo, pues parte de la felicidad radica en trascender de alguna manera más allá de tu propio beneficio. En el fondo todos buscamos ser útiles a los demás de alguna forma y aportar valor a la sociedad.
- Por lo que te podrían pagar. Además de hacer lo que te gusta y el mundo necesita debes preocuparte también de generar ingresos, para vivir y para crecer. Este baño de realidad es necesario a la hora de hacer encajar estas 4 áreas vitales, pues después de todo tienes que ganarte la vida de alguna forma.
- Lo que se te da bien hacer. Definir esta área vital es más complejo de lo que pueda parecer, pues eres tú mismo el que conoce mejor que nadie tu talento, tus virtudes y habilidades. No sólo las que ya conoces, sino las que puedes desarrollar si te formas adecuadamente. Es importante que no bloquees tus aspiraciones simplemente porque creas que algo no se te da bien o porque alguien te hizo creer
Hacer este ejercicio de forma periódica me ha ayudado a tomar buenas decisiones, saber elegir lo que me conviene e ir descartando ruido en mi vida, tantos objetos brillantes que nos desvían de nuestro camino esencial, descartando modas pasajeras y dejando de hacer lo que todos hacen cuando todos lo hacer, para hacer sólo lo que es necesario y en el momento oportuno.
Siguiendo esta estrategia estarás en el camino de descubrir qué hacer con tu vida.
Ahora te toca a ti
¿Necesitas ayuda para encontrar claridad en tu vida?
Pues para ayudarte a conseguirlo he preparado esta masterclass gratuita donde te voy a contar cómo crear un Plan B profesional basado en tu conocimiento que te de la libertad, independencia y propósito que siempre has buscado.
En esta clase intensa y directa a lo esencial aprenderás 3 cosas:
- Las claves para transformar tu carrera y encontrar tu zona de influencia
- El sistema para convertirte en emprendedor del conocimiento
- El método que te va a generar clientes de forma constante
El objetivo es ayudarte a crear tu plan B profesional y lanzar tu negocio del conocimiento cuanto antes, para que refuerces tu carrera y te vendas como el experto que ya eres en tu tema.